La mentoplastía se refiere, al procedimiento quirúrgico que se utiliza para darle forma al mentón. También conocido como genioplastia o chinplastia, se utiliza para corregir deformaciones del menton.
Este procedimiento es utilizado por los cirujanos plásticos para lograr simetría de las mandíbulas cuando se han desarrollado de forma anormal. También para corregir la falta de quijada o una parte, a lo que se le conoce como agenesia congénita.
En otros casos, se realiza este procedimiento para la reasignación de género o después de la recuperación de algún trauma o afectación por cáncer.
Son muchas las aplicaciones que tienen este procedimiento estético, inclusive cuando se deben reposicionar los huesos de la cara. A este procedimiento se le conoce como ortognática, lo cual le devuelve la capacidad de hablar o masticar.
La mentoplastía se divide en dos tipos: Cirugía de aumento de barbilla y cirugía de reducción de barbilla. Las más común de estas dos es el aumento y se debe a que la microgenia o mentón pequeño es la más común de las anormalidades.
LO QUE DEBES SABER ANTES Y DESPUÉS DE LA MENTOPLASTIA
Las personas que desean realizarse una mentoplastia, deben tener en cuenta lo siguiente:
- Dejar de fumar y medicamentos que en su composición contengan aspirina.
- Importante limpiar el mentón al menos durante dos días antes de la operación si la operación se hará con incisión submental.
- En caso que sea una cirugía intraoral, los pacientes deben realizarse enjuague bucal, tres veces en el día, dos días antes de la operación.
- La ingesta de alimentos y bebidas, debe ser suspendida durante al menos 8 horas antes.
Es importante que los cuidados posoperatorios sean estrictos de manera que apoyen la recuperación rápida. En este sentido, las personas deberán seguir una serie de cuidados especiales que incluyan:
- Ingerir alimentos no solidos al menos durante cinco días.
- Incrementar el ángulo de la cabeza en la cama.
- Evitar en lo posible, dormir con la cara en la cama o tocar el mentón.
- Que, durante las dos semanas siguientes, se evite realizar ejercicios fuertes.
Todas las intervenciones quirúrgicas conllevan riesgos asociados, y es que también la mentoplastia implica complicaciones posoperatorias. Las infecciones, un poco de sangrado o alguna reacción alérgica, son los riesgos de la mentoplastía que incluye:
- Un grado de deformación en el mentor producto de una infección.
- La falta de sensibilidad en el mentón, producto de una lesión en el nervio del mentón.
- Desgaste del hueso que se sitúa por debajo de los implantes de mentón.
Si todo ha salido como estaba previsto, la mentoplastía corrige la asimetría y desproporción facial, además de mejorar el funcionamiento de la mandíbula.